Si hay algo de lo que se está hablando en las últimas horas, es Arda Güler. El '8' de Turquía dejó muestras de cómo jugar al fútbol en un escenario importante, liderando a su selección en la sonada victoria ante Georgia. La vistosidad de ese encuentro quedó patente después del golazo que marcó el jugador blanco.
El cambio ha sido radical en menos de un año: de ser un futbolista considerado 'débil' físicamente y muy propenso a lesionarse, Güler ha pasado a pelear un puesto entre los mejores futbolistas de la Eurocopa. Sus breves apariciones con la camiseta del Real Madrid durante el tramo final de la temporada 23/24 son solo un anticipo de lo que verdaderamente puede hacer este delantero.
Con tan solo 18 años, Güler se ha convertido en una de las estrellas de la Eurocopa. Preguntando en rueda de prensa acerca de su gol, el '24' merengue ha sorprendido a todos mencionando que "mis compañeros del Real Madrid me felicitaron por la victoria". También le mandaron mensajes, antes del partido, deseándole buena suerte, algo de momento Turquía no parece necesitar para progresar en esta cita internacional.
Recordatorio sorpresa
Sin embargo, Arda Güler no solo se ha acordado de sus compañeros: "el entrenador también me escribió antes del partido, me motiva mucho". Esta mención directa a Carlo Ancelotti no es casualidad. El míster de Reggiolo asumió de forma casi personal la tutela deportiva del propio Güler según arribó a la Ciudad Real Madrid, pero su progreso se vio rápidamente detenido por la larga cadena de lesiones que le mantuvo apartado hasta mediados de marzo.
Carlo Ancelotti siguió de cerca su proceso de recuperación y creyó conveniente reintroducirle de forma definitiva en la disciplina deportiva merengue cuando el Real Madrid ya tenía prácticamente ganada la Liga: pese a todo, su gol contra la Real Sociedad en el Reale Arena sumó tres puntos clave. El vínculo entre el futbolista turco y el entrenador italiano parece haberse estrechado durante esta temporada... y ahora solo queda saber qué rol tiene reservado para él.