No atraviesan buenos tiempos en 'Can Barça'. El conjunto azulgrana dispone de una inestabilidad institucional que es bastante preocupante para los intereses culés. La gestión de Joan Laporta deja mucho que desear y son muchos los que ya empiezan a cuestionar el trabajo del presidente. Se puede decir que hay voces discordantes. No es para menos, ya mucho han tardado.
Todo ello porque va de ridículo en ridículo. Realmente, no lo puede hacer peor y es que es un equipo que tiene un futuro por delante que no pinta nada bien. Asimismo, conviene resaltar que tira mucho de populismo y que, además, ha hecho promesas que no las ha llevado a cabo.
En más de una ocasión, desde la ciudad condal vendieron que iban a intentar hacerse con los servicios de Víctor Osimhen. Nada más lejos de la realidad. El delantero del Nápoles nunca ha estado cerca de recalar en el conjunto azulgrana e incluso ahora se pueden quedar sin Vitor Roque. Antonio Conte, seleccionador de la escuadra italiana, lo pretende.
Sin pena ni gloria
La situación del delantero brasileño es bastante mala y, realmente, deja mucho que desear. Por esta sencilla razón, su representante cargó contra Xavi en varias ocasiones y lo cierto es que lo hizo con toda la lógica del mundo. Tiene motivos para ello.
Por tanto, habrá que ver lo que finalmente termina ocurriendo. Lo que está claro es que el proyecto culé no parece nada serio, mientras que en Valdebebas dan a su afición motivos para ilusionarse. En Chamartín confían y esperan en seguir viendo conquistar títulos al Real Madrid.