En el partido entre el Real Madrid y el Espanyol, se produjo un gesto que pasó desapercibido y dejó ver la buena sintonía que existe entre dos de las grandes estrellas del equipo blanco: Vinícius Jr y Kylian Mbappé.
Cuando el Madrid dispuso de un penalti, era Vinícius quien, según el orden de alternancia en el lanzador, debía encargarse de lanzarlo. Sin embargo, en un sorprendente gesto de generosidad, el brasileño quiso cederle la pena máxima a Mbappé para que pudiera marcar.
Este momento cobra aún más relevancia teniendo en cuenta que, previamente en el partido, había sido Mbappé quien asistió a Vinícius para que el brasileño anotara su gol. La química entre ambos jugadores quedó patente, desmintiendo así los rumores que, desde la llegada de Mbappé al club, lo señalaban como una figura que podría generar tensiones en el vestuario.
Inseparables
Muchos críticos anticipaban que el delantero francés, tras su controvertida salida del Paris Saint-Germain, podría repetir los problemas que vivió en el equipo parisino, donde su relación con Neymar y otros compañeros fue objeto de debate constante.
En el PSG, Mbappé fue acusado de ser una figura divisiva, generando fricciones dentro del grupo. Algunos temían que esa historia se repitiera en el Madrid, con especulaciones sobre su posible egoísmo o falta de conexión con jugadores clave como Vinícius o Rodrygo.
Sin embargo, el gesto de ceder el penalti entre ambos demuestra todo lo contrario: la relación entre las estrellas parece ser positiva y basada en el compañerismo, lo que refuerza la cohesión dentro del vestuario.
Carlo Ancelotti ha enfatizado la importancia del equilibrio y la armonía en el grupo, y estas señales de solidaridad entre los jugadores más importantes del equipo refuerzan la idea de que el Real Madrid es un bloque unido, con ambiciones compartidas.