El Real Madrid se ve afectado, de rebote, de todo lo que está sucediendo en Brasil. La CBF centra todas las novedades a nivel deportivo en el país sudamericano por una inexplicable polémica en torno al ya destituido presidente Ednaldo Rodrigues. El mayor valedor de Carlo Ancelotti como nuevo seleccionador de la Canarinha fue cesado por la intervención de la justicia brasileña.
Más turbulencias
A pesar de la colocación de José Perdiz como presidente interino, se necesitan unas elecciones para designar de forma oficial al sucesor de Rodrigues al frente del fútbol brasileño. El plan de las autoridades verdeamarelas no encaja con las exigencias de FIFA y CONMEBOL, que podrían actuar con una medida llamativa y nunca antes vista.
Hay mucho en juego
Según el reglamento interno de la CBF, se deben celebrar nuevas elecciones en el plazo de 30 días. Este límite de tiempo está cerca de consumirse definitivamente, por lo que los preparativos de este evento ya habrían comenzado en el interior de la Federación carioca. Tales movimientos han despertado la atención de ambas entidades supranacionales, que 'amenazan' con excluir a sus divisiones y futbolistas de los torneos internacionales que tengan lugar en los próximos meses.
"La FIFA y la CONMEBOL desean insistir enérgicamente en que, antes de que tenga lugar esta misión, no se tome ninguna decisión que afecte a la CBF, incluidas las elecciones o los nombramientos electorales". La misiva enviada por estas instituciones no se queda ahí y señala que el castigo implicaría un 'castigo' "que también puede incluir una suspensión".
Esta decisión de FIFA y CONMEBOL "significaría que los equipos representativos y de clubes de la CBF ya no podrían participar en ninguna competición internacional mientras esté suspendida". Así, Brasil quedaría excluida de la Copa América 2024 y otros compromisos, como el amistoso entre España y Brasil programado para marzo de 2024, se eliminarían del calendario.
Haciendo tiempo
La única forma de solucionar este entuerto en el que ha entrado la CBF es hacer sus elecciones siguiendo las instrucciones de FIFA y CONMEBOL, que no reconocen la autoridad del presidente interino José Perdiz y darían un hipotético visto bueno a las elecciones solo después de su "misión conjunta", tal y como señalan en la carta enviada en Nochebuena a la CBF.