Leo Messi se hizo con su octavo Balón de oro después de realizar un año bastante discreto. Su Mundial, que lo ganó sin realizar grandes actuaciones, le bastó para llevarse este galardón que no ha pasado para nada desapercibido. Más aún tras ver que hay futbolistas como Erling Haaland y Rodri que han hecho un triplete con su equipo.
En el vestuario del Real Madrid, al igual que gran parte del mundo del fútbol, han alucinado con que el argentino se haya hecho con el galardón. Una de las expresiones que más se repetió fue "Que cachondeo".
Lo cierto es que la FIFA le hace un flaco favor al de Rosario con estos regalos. No es la primera vez que ocurre, dado que en 2021 no se lo dieron a Robert Lewandowslki y en 2010 se lo quitaron a cualquier jugador español que conquistó el Campeonato del Mundo en Sudáfrica.
Pérdida de prestigio
Evidentemente, estas decisiones han hecho que el Balón de Oro cada vez tenga menos prestigio con el paso de los años. Se está viendo que se premia el márketing por encima de todas las cosas y los méritos deportivos de los futbolistas han quedado a un segundo plano.
De esta manera, el Mundial de Qatar valió para que Messi se lleve otro Balón de Oro. La verdad es que era un secreto a voces, pero el año que ha realizado es un poco lamentable.