Son buenos tiempos en el Real Madrid. Pese a la derrota en el derbi, la cúpula blanca está satisfecha con el trabajo realizado por Carlo Ancelotti hasta la fecha: líderes en solitario de la Liga y con la posibilidad, hoy martes 3 de octubre, de certificar el liderato momentáneo del grupo de Champions League.
Aunque todo marcha como debería, hay ciertos problemas que todavía no se solucionan. Uno de ellos es la situación respecto de un futbolista muy importante y notorio en el vestuario madridista: Luka Modric. La situación del '10' croata ha empeorado rápidamente, puesto que sus apariciones se han recortado y no parece que las ideas de Carlo Ancelotti vayan a cambiar pronto.
Sorprende a todos
Una de las últimas apariciones del propio Modric ha dejado muy preocupado a Florentino Pérez. El presidente madridista está especialmente cabreado con cómo se está gestionando el que podría ser el último año del genio de Zadar en el Real Madrid. Un vídeo del túnel de vestuarios de Montilivi podría desvelar cómo se siente Modric en realidad.
Estas sensaciones negativas no gustan nada a Florentino Pérez. Si bien el líder de la junta directiva, al mismo tiempo que el resto de ejecutivos merengues, está totalmente de acuerdo con las decisiones tomadas por el míster de Reggiolo y respetan su trabajo al 100%, sí consideran que la gestión del último año de Luka Modric como futbolista blanco podría mejorar en términos de protagonismo.
Los constantes rumores acerca de sus suplencias y la posibilidad de que se marche durante el mercado de invierno empiezan a preocupar en las oficinas de Valdebebas, donde no están dispuestos a poner fin a la etapa de una leyenda madridista sin tanto brillo como realmente merece.
Es urgente
Las sensaciones que la situación está dejando en Luka Modric molestan a Florentino Pérez, que buscará hablar con el centrocampista balcánico para que afronte este llamativo cambio de rol de otra manera y con sensaciones diferentes, sobre todo para evitar que se produzcan imágenes tan fuertes como las vividas en el túnel de vestuarios del estadio del Girona.