Antes de lograr su soñado fichaje por el Real Madrid, Kylian Mbappé tuvo que pasar por varios meses complicados en el PSG, con el club parisino y Nasser Al-Khelaïfi haciéndole la vida imposible para tratar de mantenerlo en el equipo.
Siendo apartado de la gira y de los entrenamientos, manteniendo filtraciones para que los ultras y medio lo odiaran, el PSG ha sido condenado a pagar la suma de 55 millones de euros al jugador, una cantidad que se le debía por pagos y primas atrasadas.
Otra victoria sobre el PSG
Siendo su estrella durante varias temporadas, la salida de Mbappé fue un duro golpe para un PSG que, en vez de aceptar el adiós de su jugador, optó por realizar todas las acciones posibles para evitar su salida, llegando a retrasar el salario y las primas de los meses de abril, mayo y junio.
Habiéndose despedido con una temporada donde logró la cantidad de 44 anotaciones, el atacante de 25 años finalmente ha obtenido justicia en contra de su ex equipo y, sobre todo, de Al-Khelaïfi, quien hizo de su última temporada en París un completo infierno.
Esta condena ha sido el golpe fulminante que Mbappé ha dado a un PSG que no tiene otras opciones más que pagar los 55 millones de euros que le deben al francés, siendo las consecuencias de los malos tratos que mantuvieron por mucho tiempo.
Una merecida y justa recompensa
La actitud que tomó el PSG en contra de Mbappé muestra la verdadera cara de los parisinos, siendo un club despreciable que hace hasta lo impensable con tal de impedir que sus jugadores terminen saliendo para poder destacar en un equipo donde puedan aspirar a más y mejores títulos.
Dado el amplío poderío económico con el que cuenta el PSG, la cantidad de 55 millones no es nada para un equipo que, a pesar de este poder, ha sido vencido por un Mbappé que finalmente ha obtenido la justicia que se merece.