Los blancos consiguieron sacar tres puntos importantísimos ante el Alavés de cara al título liguero. El gol de Lucas Vázquez en el descuento sirvió para que el Real Madrid durmiera líder y se proclamara como campeón de invierno. Ancelotti se marchó de Vitoria satisfecho con sus jugadores y consideró que se dejaron todo sobre el campo.
Sin embargo, el técnico madridista estaba cabreado con el arbitraje que se realizó en el Estadio de Mendizorroza. La actuación de Díaz de Mera dejó mucho que desear, ya que pasó por alto varias acciones que podrían haber cambiado el transcurso del partido.
Sin duda, la acción que más enfadó a Ancelotti fue el penalti clarísimo sobre Brahim que no fue señalado. El delantero del Real Madrid sufrió un agarrón sobre la línea del área que no fue considerado ni falta. Además, el VAR no decidió revisar la jugada, por lo que esta acción se quedó en el limbo.
Ancelotti no podía dar crédito al ver las imágenes y comentó lo siguiente mientras veía la jugada repetida en la tablet: "Si digo lo que pienso me van a sancionar. No diré nada...". Poco después, el italiano puso rumbo a la sala de prensa y decidió hablar del colegiado siempre desde el respeto y sin darle mucha importancia para evitar problemas.
Una más para el historial
Con más de 12 cámaras sobre el terreno de juego, Mediapro solamente decidió mostrar una única toma y donde además, la acción se ve de forma claramente. Las redes sociales también han estallado en estas últimas horas y no pueden comprender cómo nadie desde la sala VOR lo pudo ver, a pesar de que solamente tuvieron una única repitición.