Si alguien ha caído de pie en el Real Madrid, ese ha sido Jude Bellingham, quien parece que encajado en la plantilla del club blanco a la perfección. Como anillo al dedo. Pues el inglés parece ser uno de los elementos más funcionales en el terreno de juego y siendo actual Pichichi de la competición, pero además de haber formado una relación de amistad con varios de los jugadores de la plantilla en cuestión de pocas semanas.
La llegada de Bellingham ha reforzado en muchas formas al equipo, pues no solamente ha sido a nivel táctico, donde también ha influenciado de sobremanera, sino a nivel social, pues el inglés ha llegado al club como si de su hogar se tratase y se ha formado una reputación y aceptación de parte de los demás jugadores que parece hasta inusual.
Con esto, hay un mensaje muy claro de parte del jugador inglés a otro futbolista que formó parte del club merengue y que deja claro que en el Real Madrid no es sólo exigencia y ganar, sino también la convivencia y la formación de lazos que en un futuro podrían ser cruciales.
El zasca de Bellingham
Jude ha dejado claro que la actitud es uno de los puntos más importantes para formar lazos, incluso en clubes tan grandes como el Real Madrid, un mensaje que le ha dejado a un ex madridista como Martín Odegaard, con su famosa frase “No es fácil hacer amigos en el Real Madrid”, declaraciones hechas por el noruego en su salida al Arsenal.
La llegada de Jude ha dejado claro que esto es cuestión de actitud y de ganas de hacer amistad, una cuestión que tal vez el mismo Martin no hacía y que, por su parte, Jude lo ha sabido aprovechar. Ahora el inglés está pasando de lo mejor su estancia en los vestuarios del mejor equipo del mundo, mientras que Martin está haciendo un excelente trabajo en el Arsenal, todos en su lugar ideal.