Antes de la disputa del último partido de Liga la temporada pasada, que enfrentaba en el Santiago Bernabéu al Real Madrid con el Betis, Toni Kroos anunciaba que se retiraba este verano del fútbol profesional, cuando acabase su participación en la Eurocopa. Todavía le quedaba la final de la Champions, pero quiso despedirse del madridismo.
Fue un duro golpe que se palió al conseguir alcanzar un acuerdo con Modric para su renovación. Sin embargo, a sus 39 años, el futbolista croata parece que afronta su última campaña como merengue, por lo que el próximo verano el club blanco se quedarán sin los dos centrocampistas que han dominado la última década, por lo que ya buscan sustitutos.
Desde este pasado verano no han parado de surgir nombres como Wirtz, Kimmich, Musiala o Rodri, aunque ninguno de ellos parece que vaya a ser sencillo y va a obligar a un fuerte desembolso y a tener que pelear con otros clubes que también están interesados, por eso manejan otra alternativa que Ancelotti ha puesto sobre la mesa.
El gran deseo de Ancelotti
Más allá de los nombrados anteriormente, Ancelotti tiene un gran deseo, Nicolo Barella. El centrocampista del Inter es uno de los jugadores cuyas cualidades más se asemejan a Kroos y considera que puede ser el recambio ideal, aunque es consciente de que no será nada sencillo que Florentino consiga hacerse con sus servicios.
En primer lugar porque supone un gran desembolso, tiene contrato a 2029, y a sus 27 años no lo consideran una prioridad. Pero es que el Manchester City y el Liverpool también quieren lograr su fichaje y están dispuestos a poner encima de la mesa una oferta descomunal, que desde el Real Madrid podrían no alcanzar, lo que les dejaría fuera de la pelea por hacerse con sus servicios.