El Madrid certificó su 15ª Copa de Europa en Wembley y continúa ampliando su historia en la mejor competición del mundo. Sin embargo, no todo van a ser noticias positivas para el equipo merengue, ya que la consecución de este título tendrá algunas consecuencias para el club.
Varios de los fichajes que se han llevado a cabo en el Santiago Bernabéu han traído consigo variables que fijaban un bonus extra por conseguir la Champions League. En esta caso, el Madrid tendrá que desembolsar ocho millones de euros al Chelsea por el préstamo de Kepa Arrizabalaga.
El equipo inglés fijó un bonus en el caso de que el club blanco ganase la competición europea. De esta manera, el traspaso de Kepa a la entidad merengue ha sido más caro de lo esperado y una cesión que, además, tampoco ha resultado nada rentable para las arcas blancas.
Además, operaciones como la de Bellingham también incluía una variable que el Madrid debía pagar si el equipo de Ancelotti ganaba la Champions League. Este tipo de bonus es algo habitual en todos los traspasos, pero que en el caso del conjunto merengue, siempre les sale caro.
Rumbo a Londres
Kepa vivió su último partido como madridista y el próximo 30 de junio finalizará su préstamo en el Madrid. El portero español llegó para ser el sustituto de Courtois, pero la explosión de Lunin, junto a su bajo rendimiento, hicieron que pasara a un segundo plano.
Sin embargo, en el Madrid están encantados con Kepa, ya que su actitud ha sido impecable en todo momento. El guardameta blanco ha estado implicado en todos los aspectos del equipo, trabajando y apoyando a sus compañeros en todo momento. El español cayó de pie en el grupo y su marcha se hará notar la próxima temporada.