El 'caso Mbappé', según se acerca el final del mercado de fichajes de invierno de la presente temporada, empieza a adquirir nuevas versiones y aristas. La última sería, a raíz de las informaciones publicadas por BILD y L'Équipe, las posibles negociaciones que el Real Madrid y el entorno de Kylian Mbappé estarían teniendo para poner punto y final a este culebrón.
Tanto es así que desde París habrían señalado los requisitos para que el atacante de Bondy vista la elástica blanca desde la temporada 24/25: una prima de fichaje de 120 millones de euros y un sueldo anual de 70 millones de euros. Estas exigencias económicas entran en conflicto con la ahorrativa política que han estado mostrando los mandamases merengues en los últimos tiempos.
Cuestión de dinero
Por eso, Florentino Pérez habría hecho la última oferta en firme a Fayza Lamari, representante de Kylian Mbappé y principal responsable de cualquier negociación en la que el todavía futbolista del PSG esté interesado. Desde las oficinas de Valdebebas llega una sustancial rebaja de las proposiciones iniciales, porque el sueldo de Kylian Mbappé pasaría a ser de 35 millones de euros más primas. Ni un euro más ni un euro menos.
Este límite colocado por Florentino Pérez será definitivo. El presidente del Real Madrid dejó claro que la llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid podría darse... siempre y cuando el futbolista aceptara las exigencias del propio club blanco y dejara atrás las cifras astronómicas de las anteriores ofertas: el 'desengaño' sufrido en verano de 2022 fue un varapalo demasiado duro para los ejecutivos merengues en todos los sentidos.
Por eso los honorarios de Kylian Mbappé no son un aspecto a negociar. Al menos para el Real Madrid: la voluntad del club blanco de mantener la escala salarial que ha construido en los últimos años a base de complicadas maniobras con otros clubes de la élite europea podría quedar totalmente descompensada si se cumplen los requisitos iniciales de Kylian Mbappé. No ocurrirá en el Santiago Bernabéu.