Aunque decenas de delanteros se ofrecieron al Real Madrid durante el pasado verano, la directriz de los mandamases madridistas era clara: o Mbappé o nadie. Ni siquiera los ruegos de Carlo Ancelotti pidiendo a Harry Kane ni las tres llamadas del representante del ariete inglés sirvieron para cambiar la opinión de la junta directiva liderada por Florentino Pérez en aquel momento.
Fichaje sorpresa
Sin embargo, la situación actual del Real Madrid, con una exigua nónima de delanteros, parece una llamada a la acción por parte de los ocupantes de la planta noble del Santiago Bernabéu. Aunque desde las oficinas de Valdebebas se maneja todavía la contratación de Kylian Mbappé como agente libre, no sería suficiente para el entrenador del Real Madrid.
Tanto para Carlo Ancelotti como para el que suceda al míster de Reggiolo al frente del vestuario del Santiago Bernabéu, Kylian Mbappé llegaría al mismo tiempo que Joselu, cedido esta temporada, regresa al Espanyol. También está encima de la mesa pagar su cláusula de compra, valorada en 1,5 millones de euros, pero este movimiento podría posponerse gracias a la información de BILD.
Este diario alemán señala que el Real Madrid quiere hacerse con los servicios de Leroy Sané. El '10' del Bayern de Múnich termina su contrato en verano de 2025 y los ejecutivos blanco estarían valorando su incorporación de forma urgente para reforzar el último tercio de ataque y tener más opciones de cara a la portería contraria.
Complicación inicial
Aunque Sané no quiere renovar y parece dispuesto a agotar su contrato con el club bávaro, Florentino Pérez tendrá que hacer frente al interés del FC Barcelona. Si bien la compleja situación de la entidad azulgrana no les está impidiendo hacer fichajes del más alto nivel, el tiempo que se debería esperar para intentar contratar al '10' del cuadro germano sería excesivo por la falta de fondos para afrontar una operación que llegaría al límite de los 50 millones de euros e incluso podría superarlos con facilidad.
En ese sentido, el Real Madrid tendría la ventaja sobre la entidad presidida por Joan Laporta: mientras que en Barcelona tendrían que esperar a que Sané quedara libre para que pudiera vestir de azulgrana, su traspaso al Real Madrid podría certificarse en verano de 2024 a un precio ligeramente inferior a su valor de mercado actual, situado en los 65 millones de euros.