La amenaza de Luis Enrique a Mbappé, lo dijo en el vestuario tras irse al Real Madrid

"Ganaremos la Champions sin ti". Esa fue la contundente frase que, según fuentes internas del vestuario, Luis Enrique pronunció tras la marcha de Kylian Mbappé al Real Madrid.

Lejos de lamentarse por la pérdida de su estrella, el técnico asturiano utilizó el momento como punto de partida para construir un PSG muy distinto, más coral, más competitivo y más suyo.

En su primera temporada sin Mbappé, el PSG ha alcanzado la final de la Champions League. Se medirá al Inter de Milán en Múnich por el gran título europeo.

Un hito que valida el mensaje de su entrenador. El PSG, sin su referente ofensivo de los últimos años, ha logrado consolidarse como un equipo compacto, trabajado y explosivo.

Luis Enrique tomó el control total

Luis Enrique heredó un club en plena reconstrucción. Sin Messi, sin Neymar y ahora también sin Mbappé.

Pero el técnico no se escondió: “Con Kylian teníamos un jugador que jugaba por libre. Ahora lo controlo todo”, explicó hace meses en una entrevista. Su apuesta fue firme: sacrificar la figura individual en favor del colectivo.

Y los resultados le han dado la razón. El PSG arrasó en la Ligue 1, conquistó la Copa de Francia y está a un partido de completar el triplete. Todo eso, sin Mbappé.

El técnico español ha moldeado el equipo a su imagen. Presión alta, circulación rápida, laterales largos y extremos desequilibrantes.

Cada jugador conoce su rol y el peligro puede llegar desde cualquier zona del campo. Así lo confirmó Zaïre-Emery: “El míster dijo que sin Mbappé marcaríamos más goles. Y no se equivocó”.

Dembélé lidera la revolución

Uno de los grandes beneficiados ha sido Ousmane Dembélé. Bajo la tutela de Luis Enrique, ha firmado su mejor temporada: 33 goles y 13 asistencias. Fue elegido mejor jugador de la Ligue 1 y es firme candidato al Balón de Oro si el PSG levanta la Champions.

Y eso que su relación con el técnico tuvo un bache serio en octubre de 2024. Una sanción disciplinaria lo dejó fuera ante el Arsenal. Pero Dembélé reaccionó. Se disculpó. Volvió al once. Y explotó su mejor versión.

El PSG ya no depende de una sola figura. Es un equipo. Uno que podría hacer historia. Y si lo logra, las palabras de Luis Enrique en ese vestuario resonarán con más fuerza que nunca.