Jugador de fútbol de la selección de Turquía celebrando con el balón en la mano mientras el público observa desde las gradas
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Un niño salta al césped en pleno partido y Arda Güler hace esto: gesto de grandeza

Un niño saltó al terreno de juego en el partido de Turquía frente a México en Estados Unidos y Güler le abrazó y besó en la frente

Durante el amistoso entre Turquía y México, disputado en Estados Unidos, se vivió una imagen llamativa que dejó el resultado en un segundo plano. Un niño saltó al terreno de juego buscando a su ídolo, Arda Güler.

El futbolista del Real Madrid se lo tomó con naturalidad. Lejos de incomodarse, abrazó al pequeño y le dio un beso en la frente, un gesto que fue captado por las cámaras y que él mismo compartió después en su cuenta de Instagram.

La seguridad intervino rápido, pero la actitud de Güler debe aplaudirse y fue bien recibida por el público.

Un partido discreto para Turquía y para Güler

En lo deportivo, la noche no fue especialmente positiva para Turquía, que cayó 1-0 ante México. Fue un encuentro plano del equipo dirigido por Vincenzo Montella, que no encontró el ritmo ni las ocasiones para remontar el gol mexicano.

Arda Güler jugó los 90 minutos, pero tuvo una actuación más discreta de lo habitual. Le faltó influencia en los últimos metros y no pudo marcar la diferencia como viene siendo habitual cuando se enfunda la camiseta de su selección.

Aun así, sus números indican que lo intentó y quiso ser protagonista con el balón. Según Sofascore, el jugador obtuvo una valoración de 7.1. Completó 49 de 55 pases (89% de precisión), con 73 toques en total. También repartió tres pases clave y acertó 8 de 10 pases largos.

Jugador de fútbol con uniforme rojo abraza y consuela a un niño emocionado en el campo mientras un guardia se acerca
Foto de Arda Güler con el niño | @ArdaGuler

Aunque no fue su mejor noche, el joven madridista mantuvo el compromiso y dejó detalles técnicos puntuales.

Un gesto que trasciende el resultado

Más allá del rendimiento deportivo,  lo que más se ha comentado es su comportamiento con el niño que invadió el campo. Sin aspavientos ni tensión, Güler respondió con cercanía y respeto.

En un contexto de derrota, ese gesto le brinda una imagen muy positiva. Una escena distinta que mostró el lado más personal de un jugador que, con solo 20 años, muestra madurez en otras circunstancias que van más allá del partido.

Turquía ya piensa en su próximo compromiso. Güler, por su parte, continúa sumando minutos y experiencia, aunque con la vista puesta en llegar en las mejores condiciones al Mundial de Clubes.

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