
Anuncian el trasfondo del caso Nico Williams y el Real Madrid, hay una bomba secreta
El equipo blanco quiere ejercer presión con el extremo sobre Rodrygo y Vinicius para que decidan su futuro lo antes posible
En los últimos días, el nombre de Nico Williams ha aparecido vinculado al Real Madrid. Varios medios aseguraron que el club blanco estaba preparando una ofensiva por el extremo del Athletic.
Sin embargo, la realidad es muy distinta. Desde dentro del club aseguran que no existe un interés real por fichar al jugador.
La filtración responde a una estrategia interna. El objetivo no es reforzar la banda izquierda, sino presionar a dos figuras clave del ataque actual: Vinicius y Rodrygo. Especialmente al segundo, cuyo futuro sigue en el aire.
Rodrygo, entre el Bernabéu y la Premier
Rodrygo es el jugador más afectado por esta maniobra. Su continuidad no está garantizada y desde el club desean que defina su futuro antes del inicio del verano. Mientras tanto, Arsenal y Manchester City lo siguen muy de cerca.

Mikel Arteta y Pep Guardiola han mostrado un interés personal en su fichaje. Incluso, según fuentes cercanas al entorno del jugador, ambos técnicos ya han llamado a Rodrygo para trasladarle su confianza y explicarle su rol en sus respectivos proyectos.
Rodrygo, por ahora, guarda silencio. Sabe que con la llegada de Mbappé y el ascenso de figuras como Endrick o Arda Güler, su espacio en el once podría reducirse. Por eso, el club ha decidido aumentar la presión, dejando filtrar que podrían lanzarse a por Nico Williams.
La cláusula de Nico, la excusa perfecta
El extremo del Athletic tiene una cláusula de rescisión de 58 millones de euros. Un precio razonable en el mercado actual para un internacional español en plena explosión. Su perfil gusta en Valdebebas, pero no está en la lista de prioridades del club blanco.

La filtración ha sido calculada. Sirve para enviar un mensaje: si Rodrygo quiere salir, hay alternativas. Y si se queda, tendrá que pelear más que nunca por minutos.
En realidad, Nico Williams no llegará al Madrid salvo giro radical. Su caso ha servido como cortina de humo y como palanca de presión interna.
Porque en el Real Madrid, como ya ha ocurrido otras veces, nada se dice sin intención. La estrategia va más allá del mercado: es política deportiva en estado puro.
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