La confesión de Endrick sobre su doblete ante el Celta: 'Creo que ha sido...'

El Real Madrid ha vencido al RC Celta de Vigo por cinco goles a dos. El equipo de Carlo Ancelotti daban la cara ante su afición después de lo ocurrido en Yeda. El madridismo esperaba ver una reacción de su equipo después de la dura derrota ante el FC Barcelona.

Más allá del juego del equipo, lo importante ha sido que se ha conseguido el pase a los cuartos de final de la Copa. El choque ha tenido de todo y estaba prácticamente sentenciado. Sin embargo, dos errores defensivos hicieron que los vigueses llevaran la eliminatoria a la prórroga.

Fue ahí cuando apareció Endrick. El brasileño se convirtió en el héroe inesperado de la noche. Hizo un doblete en la prórroga y demostró tener el gol entre ceja y ceja. 

Especialmente,  el 3-2 fue un tanto importantísimo y que deja claro que es un futbolista que puede triunfar con la elástica blanca.  El ex del Palmeires recibió un pase de Arda Güler y prácticamente sin mirar hizo un golazo. 

Tras el partido, atendió a los medios de comunicación y se mostró muy sincero. Sus palabras no han pasado desapercibidas: 'En ninguno de los goles he mirado a la portería, creo que ha sido Dios...', afirmó.

El atacante siempre ha dejado claro que es muy religioso y que tiene mucha fé. Más allá de eso, lo importante es que, una vez más, ha demostrado que tiene una gran capacidad goleadora. Por este motivo, en Valdebebas hay quien piensa que debe de jugar mucho más.

Buenos registros goleadores

Bien es cierto que no juega todo lo que a él le gustaría. Ancelotti ha dicho en sala de prensa que debe de tener paciencia y que está contento con todo lo que aporta y la manera en la que trabaja. Pese a ello, lo destacable es que Endrick goza de buenos registros, a pesar de que no es un titular indiscutible.

Esto, evidentemente, supone que hay que ser optimistas con este futbolista y con el futuro que puede llegar a tener por delante. Él está feliz en la capital de España y con actuaciones como las de anoche se va a ganar su derecho a continuar. Florentino no se plantea venderlo ni cederlo.