Despedida entre lágrimas de Ancelotti, hasta Florentino acabó llorando en el palco

Hoy, el Santiago Bernabéu vivió una jornada inolvidable, marcada por la emotiva despedida de Carlo Ancelotti, quien pone fin a un ciclo histórico al frente del Real Madrid. El entrenador más laureado de la entidad dice adiós, y la afición no falló en rendirle un tributo digno de su trayectoria. Aplausos y cánticos inundaron el estadio, reflejo del inmenso cariño que le tiene el madridismo.

Uno de los instantes más emocionantes llegó cuando Ancelotti, acompañado por sus familiares, fue homenajeado con un vídeo que repasaba su paso por el club. La emoción pudo con él, y entre lágrimas, recibió una ovación unánime de un Bernabéu completamente entregado.

Visiblemente emocionado, Carlo Ancelotti no dejó de repetir que esta etapa había sido la más significativa de toda su carrera profesional, una experiencia imborrable. ‘Carletto’, eterno madridista, se marcha dejando una marca profunda en el corazón de la afición y grabando su legado en lo más alto de la historia del club.  Al finalizar el encuentro, se dirigió con palabras llenas de gratitud a quienes nunca dejaron de apoyarlo desde las gradas.

El emotivo discurso de Carlo Ancelotti para despedirse del Bernabéu

"Buenas tardes. No tenéis pensar que es sencillo hablar hoy. Ha sido un honor y un place entrenar a este equipo. Quiero agradecer a Florentino. Ha sido fantástico entrenar a este grupo de futbolistas y ha sido fantástico compartir con vosotros estos momentos", arrancó Carlo Ancelotti.

"Ha sido extraordinario vivir esta historia con vosotros, una historia inolvidable. Nadie puede olvidar los goles de Benzema frente al PSG, nadie puede olvidar los goles de Rodrygo contra el City y nadie puede olvidar el pase de Luka contra el Chelsea. Nadie puede olvidar los dos goles de Joselu. Tampoco puedo olvidar cada día que he pasado aquí. Hala Madrid y nada más. Os quiero", sentenció Carlo Ancelotti entre lágrimas.

Florentino Pérez tampoco pudo ocultar su emoción. Desde el palco, el presidente vivió intensamente cada momento del homenaje y, entre aplausos y alguna lágrima, se unió al reconocimiento al que ya es considerado el entrenador más grande en la historia del Real Madrid.