Giménez escupió a Bellingham en el derbi y se fue de rositas, imagen repugnante

Estaba claro que  la polémica del derbi no se iba a acabar tan fácilmente después de lo que sucedió. Y ya no estamos hablando del penalti que para muchos analistas imparciales no era. Sino por las imágenes que salen horas después gracias a los aficionados en el estadio.

Tanto la retrasmisión como los medios de comunicación intentan tapar la verdad para construir el relato. Pero en redes sociales circula lo que de verdad ocurre en los campos bajo el amparo arbitral. En esta ocasión es por un repugnante detalle que nadie vio, o no quisieron ver.

Fue con el balón parado cuando antes de botar un córner los jugadores del Atlético fueron a por los del Madrid. Primero Giménez que se acerca a Bellingham y le escupe a los pies  de forma repugnante. Y después es Koke el que empuja a Asencio  cuando pedía explicaciones al central uruguayo.

Lo peor de esta secuencia de imágenes es que no ha sido hasta 2 días después cuando han salido  a la luz. No hubo ninguna repetición para apreciar lo que había hecho Giménez. Y desde los medios de comunicación se ve que tampoco lo habían visto y por eso no han hablado de ello.

Giménez sale impugne de una acción vergonzosa gracias a la inacción del VAR

Resulta sorprenden como el VAR sí que entró para que se revisara el supuesto penalti de Tchouaméni. Para la gran mayoría de analistas no se tenía que haber señalado, pero lo acabaron pitado. Todo ello gracias a la revisión minuciosa de De Burgos Bengoetxea para llamar a Soto Grado.

Pero se ve que en el momento del escupitajo, una falta de respeto y una provocación, tenía las pantallas apagadas. Algo similar a lo que sucedió una semana antes con  la criminal entrada de Carlos Romero. El VAR solo interviene cuando les conviene y en los demás casos se lavan las manos.

Lo más vergonzoso de esto es que Giménez se marchó de rositas después de una falta de respeto. Es más, Soto Grado se fue directamente a por Asencio con una actitud chulesca. Daba la espalda a los jugadores rojiblancos, demostrando que les quería defender a pesar de sus acciones.