De hacer las maletas con Ancelotti a titular con Xabi, paraliza su adiós del Madrid

Arda Güler ha dado un giro radical a su situación en el Real Madrid. Pasó de estar con un pie fuera del club a ilusionarse con ser titular en el nuevo proyecto de Xabi Alonso. Todo ha cambiado en cuestión de días y la razón es clara: el nuevo técnico confía en él.

El joven turco ya lo ha demostrado en el debut ante el Al Hilal. Entró en el minuto 66 y revolucionó el partido. Fue vertical, atrevido, con ganas de demostrar.

Tuvo una ocasión clarísima, un remate que acabó en el larguero tras un buen centro de Vinicius. Se lamentó, sí, pero también se ganó el respeto de Xabi.

Encaja en la idea de Xabi Alonso

Xabi apuesta por el talento puesto que le gustan los jugadores creativos, técnicos y con visión. En ese molde encaja a la perfección Arda Güler ya que no es un extremo puro ni un mediocentro clásico. Es un futbolista que flota entre líneas, que encuentra espacios donde otros no los ven.

Durante su etapa en el Bayer Leverkusen, Xabi encontró en Florian Wirtz a su hombre clave. Arda no es una copia, pero sí recuerda por momentos al alemán. Ambos son inteligentes, zurdos y con desequilibrio. La idea del entrenador es potenciar su fútbol y Güler lo sabe.

Confianza renovada y cambio de planes

Con Ancelotti, Arda no se sentía protagonista  y las oportunidades eran escasas. Y su entorno ya manejaba la opción de salir este verano, pero con Xabi, todo ha cambiado. Siente que va a jugar y que ahora sí va a tener minutos de calidad.

La renovación de la plantilla y la salida de Luka Modric le abren la puerta. Xabi quiere un equipo que combine talento joven con experiencia y Arda, con solo 20 años, está preparado y lo ha demostrado cada vez que ha pisado el campo.

El Mundial de Clubes puede ser su trampolín. Si mantiene este nivel, su rol crecerá mucho esta temporada y tanto su entorno como el club son conscientes de ello. Por eso, de momento, se paraliza cualquier opción de salida.

Arda ha pasado de estar en duda a ser una apuesta firme. Xabi lo tiene claro: Güler es presente y también, futuro.