Ancelotti lo sabe y Florentino también, no pueden seguir los 2 en el Real Madrid
La falta de minutos en el Real Madrid le va a llevar a tomar la decisión de marcharse
Al Real Madrid se le pueden abrir varios frentes en la segunda parte de la temporada con el futuro de jugadores. Sobre todo para aquellos que apenas están contando para Ancelotti. Es el caso de Lunin, que hasta ahora solo ha jugado cuando no ha estado disponible Courtois.
El ucraniano renovó su contrato al empezar la campaña, pero parece complicado que pueda seguir. Thibaut le está cerrando todas las puertas, sobre todo viendo el nivel que está demostrando. Por eso Lunin ya se plantea una posible salida de cara al 2025, para el próximo curso.
Ancelotti sabe que ahora mismo es imposible sentar a Courtois, que ha regresado a su mejor nivel. Es el mejor portero del mundo, y Florentino también lo sabe, por lo que buscan soluciones. Aunque el belga todavía tiene que resolver su situación ya que acaba contrato en el 2026.
Pero todo indica que no serán muy complicadas sus negociaciones y podrían firmarlo durante los primeros meses del 2025. Por lo tanto, si renueva, Lunin tendrá de buscar una salida. El Real Madrid está dispuesto a escuchar ofertas si el arquero ucraniano así lo pide.
Una situación diferente vive otro jugador siempre con el cartel de transferible
En los primeros partidos de la temporada parecía que Ceballos iba a estar en la misma situación de Lunin. El utrerano apenas entraba en los planes de Ancelotti y se veía sin minutos sobre el césped. De hecho ya se especulaba con su marcha incluso durante el mercado invernal.
Pero poco a poco se ha hecho un hueco en la rotación, entrando incluso como titular en muchos encuentros. Hasta tal punto le ha dado la vuelta a su situación, que ya nadie piensa en su marcha. Ahora mismo cuentan con él y se está asentando con mucho peso en el juego blanco.
Entre otras cosas, porque Ceballos es el único jugador que ha sabido asumir las labores de Toni Kroos. Está aportando mucho sobre todo en la construcción del juego y en salir de la presión. Por eso, a diferencia de Lunin, Dani sí que tiene más o menos segura su continuidad.
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