El CTA, otra vez retratado: el Real Madrid es el más perjudicado por la permisividad

El Real Madrid lleva cierto tiempo abogando por la regeneración del colectivo arbitral. Los mandamases liderados por Florentino Pérez, especialmente desde el estallido del 'caso Negreira', han buscado la forma de unir a todos los clubes del fútbol español para cambiarlo. Lejos de haber obtenido el efecto deseado, el Real Madrid parece haberse ganado la animadversión  de los clubes de LaLiga.

A pesar de  esos mismos equipos también elevan sus quejas y protestas, jornada tras jornada, sobre la actuación de los árbitros de nuestro país. Uno de los principales argumentos en los que se apoya el Real Madrid para defender su punto de vista son las  estadísticas del saldo arbitral. Esos datos reflejan unas tendencias tan anómalas como llamativas  que abren muchos debates.

Las comparaciones entre los saldos de diferentes clubes dejan apreciaciones que indignan al madridismo. La última está construida en torno a las faltas a favor que necesita el club blanco para que uno de sus jugadores rivales sea apercibido con tarjeta amarilla. Las diferencias respecto del resto de equipos son de consideración.

Porque el Real Madrid lidera esa improvisada clasificación con un promedio de 12,4 faltas. Es decir, los futbolistas rivales podrían hacer más de 12 faltas a los jugadores del Real Madrid sin ver una cartulina amarilla. El FC Barcelona se halla en el penúltimo puesto de esa lista, con apenas un 5,4 en faltas que provocan una amarilla.

Otra anomalía estadística

El club que tiene el registro más bajo en ese sentido es el Valencia. Los rivales del cuadro levantino, instalado en los puestos de descenso esta temporada, apenas cometen 4,5 faltas antes de ver una cartulina amarilla. El segundo equipo en esta clasificación es la Real Sociedad, que tiene un registro de  8,7 faltas: hay una distancia de casi cuatro faltas respecto del Real Madrid.

Los datos abren, nuevamente, los debates respecto de las actuaciones del colectivo arbitral en nuestro país. Las polémicas atraídas hacia la órbita de la entidad presidida por Florentino Pérez no son suficientes como para hacer que el cuadro blanco se rinda en su propósito. Sobre todo mientras la sombra del 'caso Negreira', que también señala al FC Barcelona, siga planeando por encima del fútbol español.

Así las cosas, los movimientos del Real Madrid parecen haber encontrado cierta respuesta por parte de la nueva dirigencia de RFEF. Rafael Louzán, actual presidente de la Federación Española de Fútbol, ha incluido al Real Madrid en una reunión muy importante para el futuro del colectivo arbitral y el deporte rey español.

Los emisarios del club blanco acudirán a esta cumbre defendiendo las mismas ideas que se pueden escuchar en Real Madrid TV o a través de los comunicados oficiales. Porque la polémica arbitral  también agota  a los ocupantes de la zona noble del estadio Santiago Bernabéu.