Bellingham, a patadas, su reacción al final del Madrid - Valencia generará polémica

El Real Madrid ya ha pasado página de lo sucedido el fin de semana contra el Valencia en el estadio Santiago Bernabéu.

Los dirigidos por Carlo Ancelotti ya tienen el foco en el Arsenal, equipo al que enfrentarán este martes en el duelo de ida de cuartoa de final de la Champions League.

Sin embargo, la derrota contra el Valencia aún está siendo muy comentada por el madridismo, sobre todo por el golpe inesperado que supuso.

"Ahora es más complicado pelear por la Liga, pero queremos hacerlo bien hasta el final porque aún tenemos opciones. Tenemos que seguir peleando hasta el último partido. Debemos tener en cuenta que los pequeños detalles nos han condenado. El penalti, el balón parado y el gol anulado. Son pequeños detalles que cambian la dinámica del partido. El Valencia hizo un trabajo fantástico pero el partido mereció ganarlo el Madrid. También hay cosas que mejorar", expresó el propio Carlo Ancelotti en rueda de prensa al término del partido en el estadio Santiago Bernabéu.

Frustración de Jude Bellingham

Estas palabras del entrenador italiano reflejaron perfectamente la decepción del madridismo y sus futbolistas.

Uno de los que más enfadado acabó el partido fue el inglés Jude Bellingham, quien siempre se lo deja todo por el Real Madrid en el terreno de juego.

El '5' merengue, quien sabe que no firmó su mejor partido, es consciente de la oportunidad que perdió el equipo, más aún con un empate del Barcelona ante el Real Betis  que deja clara la ocasión que desperdiciaron los madridistas de quedarse a tan solo un punto de los azulgranas en la clasificación liguera.

Esto explica que en las últimas horas corriera como la pólvora en las redes sociales una imagen de Jude Bellingham descargando frustración.

El inglés, que no ha hecho ningún comentario al respecto, fue visto pateando la base del monitor del VAR al término del partido.

Esto confirma la frustración con la que Jude Bellingham abandonó el terreno de juego tras empatar de forma inesperada 1-1 con el Valencia.

Aunque esta acción no está nada bien, sobre todo por los millones de niños que siguen al británico, la realidad es que demuestra su gran espíritu de competitividad.