Ancelotti se fue a por Mbappé en el vestuario de San Mamés, cara a cara:

Las malas sensaciones han vuelto a instalarse en el Real Madrid después de la derrota ante el Athletic Club de Bilbao.  Kylian Mbappé, como ya ha ocurrido otras veces esta temporada, es uno de los más señalados: volvió a fallar  un lanzamiento de penalti.

Esa circunstancia  impidió que el Real Madrid empatara el partido, algo que terminó condicionando a los pupilos de Carlo Ancelotti. A pesar del varapalo que ha significado no sumar ningún punto de la visita a San Mamés, el entrenador italiano tiene claro que la situación se puede remontar.

Así lo ha dejado claro su charla técnica. Pero también aprovechó un momento idóneo para hablar cara a cara con Kylian Mbappé:  el '9' no es capaz de reencontrarse con su mejor versión desde que llegó al club blanco. Las  palabras en el aeropuerto de Bilbao son una sentencia muy clara.

Porque Carlo Ancelotti pidió a su delantero que "tienes que seguir tranquilo, continuar trabajando y no leer la prensa". Esos tres consejos del míster de Reggiolo al atacante de Bondy son las guías básicas para  evitar que profundice en su mal momento  de forma futbolística y anímica.

En el aire

No parece que el cuerpo técnico haya encontrado una solución  para este gran problema. El pobre rendimiento de Kylian Mbappé en lo que llevamos de temporada despierta muchos comentarios... y el  apoyo casi incondicional del madridismo, como se pudo ver durante el partido contra el Getafe.

Sea como fuere, el dilema en torno al nuevo '9' del Real Madrid continuará durante algunos partidos más. Carlo Ancelotti sabe que se juega mucho más que varios títulos durante el mes de diciembre: las derrotas contra Athletic Club y Liverpool también le han colocado  en el disparadero.

Los rumores sobre la  posible llegada de Xabi Alonso  se suman a la preparación  que habría hecho Santiago Solari, desde hace tiempo, como entrenador interino. La continuidad  de Carlo Ancelotti para la próxima temporada, su última como técnico blanco, no está ni mucho menos garantizada.

Sobre todo si el mal ritmo competitivo del equipo  se extiende hasta primavera de 2025. Las opciones  del Real Madrid de ganar títulos todavía son tangibles, pero derrotas como la sufrida en San Mamés restan muchos enteros y  complican conseguir más logros  deportivos.